ARGENTINA DEBE VOLVER A SER LIBRE Y RESPONSABLE

ARGENTINA DEBE VOLVER A SER LIBRE Y RESPONSABLE

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Lamentablemente a partir del 4 de Junio de 1943 muestro país se vinculó al fascismo y al nazismo y abandonó cada vez mas, la convicción que la enseña de la libertad haría de ella una gran nación. Fue tan equivocado el giro político que obligó a  Winston Churchill a decir en la Cámara  de los Comunes el 2 de Agosto de 1944:”Nosotros sentimos gran pena y también ansiedad como amigos de la Argentina en este tiempo de prueba para las naciones porque no se ha comprometido a declarar sincera, claramente y sin reservas que esta del lado de la libertad y ha elegido enredarse con el mal y no solo con el mal SINO CON EL LADO PERDEDOR” (la mayúscula es del suscripto). El desenlace de la desubicación internacional argentina, lo dio Stalin cuando pidió  que se la castigara por su actitud durante la guerra .Con la ayuda de los Estados Unidos, del Reino Unido, de todas las naciones latinoamericanas y la concesión de dos votos adicionales a la Unión Soviética, se consiguió ingresar a las Naciones Unidas. Si no, nos quedábamos afuera. La pregunta obvia es ¿Aprendimos algo con apartarnos del Mundo Libre?¿En estos ochenta años desde el 4 de Junio de 1943, tenemos una situación mas holgada que otrora?¿Podemos decir que no se nota la pérdida de nuestras libertades con los golpes de Estado y el despotismo que nos hundieron durante estos años? ¿Somos mas democráticos, mas confiables, mas respetables que cuando gobernaban Marcelo T. de Alvear o Agustín Pedro Justo?. Este último, para evitar que el campo se fundiera, subió los precios de sus productos y para vencer a la pobreza, se puso a construir carreteras para darle trabajo a los desamparados. También hizo algo que no se puede olvidar fácilmente : Luego de una disputa con Lisandro de la Torre por ese motivo, se negó a no pagar las tremendas deudas que había dejado Hipólito Yrigoyen y las pago haciendo arreglos financieros religiosamente cumplidos. En el mundo había  crisis por todos lados pero en la Argentina como sus gobernantes creían en “ la palabra empeñada” los inversores locales y extranjeros, en lugar de  retirarse  como ahora lo hacen, se unían a nuestros dirigentes porque estos tenían un alto concepto del honor y del deber.

Las “malas compañías” redujeron el respeto que teníamos por nosotros mismos y nos hemos transformado en deudores morosos y mendicantes, cuando deberíamos estar recorriendo nuestro vasto territorio para ponernos a realizar obras públicas perfectamente posibles en sociedad con terceros y obteniendo ganancias notables y creando empleos para cientos de miles de compatriotas. Un siglo y medio atrás nos asociamos con los ingleses para construir ferrocarriles con los cuáles no solo unimos al país y creamos una grandiosa producción agropecuaria así como comenzamos a sustituir importaciones y dimos no menos importantes avances en el orden industrial. También se hizo algo de lo cual no se habla:  El ferrocarril bajó el costo del transporte notablemente, con lo cual se redujeron los precios. Si hoy tuviéramos una red ferroviaria como la que hemos tenido y hubiéramos construido los canales fluviales necesarios para aprovechar nuestros ríos, se reducirían  los precios de todas las mercancías y servicios.  Como lo saben los que entienden realmente de economía, la solución para la Argentina no es subir los salarios sino bajar los precios, o sea lo contrario de la disparatada política que nos ha llevado a tener , por ahora, el 100 % de inflación. Hacen unos años, un patriota argentino ,Nicolas Boscovich, escribió varias obras que deberían ser el libro de cabecera de quienes quieran saber como se pueden desarrollar las inmensas riquezas geográficas argentinas y sacar dela pobreza a cientos de miles de desdichados. Me refiero a “”Geoestrategia para la integración regional”.  Lamentablemente el Dr. Boscovich no esta mas entre nosotros, pero no cabe duda que existen muchos discípulos.

NECESITAMOS DIRIGENTES CON PERSONALIDAD QUE OFREZCAN BUENOS NEGOCIOS AL MUNDO Y NO SUPLIQUEN POR LIMOSNAS.

Nadie ignora que en  1939 la Argentina tenía el séptimo producto bruto del  mundo. Hoy (5 de Abril de 2023)  ocupa un  lugar alrededor del 75, somos uno de los países peor gobernados del planeta y muchos de cuyos dirigentes no tienen idea de lo que hay que hacer, salvo de llenarnos de deudas originadas en actos ilícitos.  Hacen unos pocos  años atrás partió a Europa un prominente funcionario de nuestro país y visitó a España, Francia, Italia, y Portugal , además  del Vaticano. Era el momento de plantear la posibilidad de intentar realizar  algunos buenos y grandes negocios con aquellas naciones para obtener recíprocos importantes beneficios. Era el momento de comenzar a convencerlos mediante la conversación y algunos documentos cuidadosamente  ilustrativos que los alrededor de  2.700.000 km2 de nuestro país  tienen inmensas riquezas  y que lo único que hace falta son buenos socios, como los tuvo en el pasado, que quisieran participar en la aventura de sacar aquellas a la luz del día para beneficio común.  Nada hizo. De ese viaje no obtuvimos que se instalara un kiosko…Mientras tanto, en nuestro país seguíamos  “combatiendo al capital” y conseguíamos que se fueran de  nuestros mercados grandes y pequeñas empresas, cansadas de tratar con funcionarios inoperantes, designados sin tomarles examen como es imprescindible que se haga, para saber si están preparados para enfrentar las responsabilidades que se les va a conferir.

Ese mismo funcionario acaba de tener una entrevista con uno de los hombres mas poderosos del orbe. Le pidió que lo ayudara económicamente , en forma mas o menos encubierta, a terminar su mandato. Para esa oportunidad debería haberse ilustrado muy cuidadosamente con los conocimientos necesarios para sabe en que área, en que región, en que momento , en que actividad,  Argentina podía ayudar a los Estados Unidos a resolver algún problema que tuvieran y decirle que lo haríamos con mucho gusto. Prefirió sugerir se le diera un apoyo caritativo…

En los dos casos que se han mencionado, los  buenos negociadores no hubieran concurrido a sacarse una foto, sino a instalar en el ánimo de sus interlocutores la idea que en el país  de quien los visita existe la energía, el pundonor y la inteligencia necesarios para iniciar importantes tareas en beneficio común.

La Argentina debe dejar atrás los miedos por lo extranjero  e inmoralidades que le inculcó el fascismo, volver a respetar las libertades defendidas por  Belgrano, San Martín,  Sarmiento, Roca y otros patriotas, educarse como otrora y amar a su Patria como ellos lo hicieron.

Juan José Guaresti (nieto)

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